Cuenta la Biblia como Esther llegó a casarse con el Rey de Persia sin que él se diera cuenta que ella era judía y cuenta también sobre el impacto de su decisión al momento que su séquito planeaba la aniquilación del pueblo judío.
Cuando su tío Mordejai se entera de estos planes le solicita a Esther que acuda al rey y le pida que cancele el decreto.
Esther estaba indecisa, ya que ella sabía que una visita al rey sin que él la llamara, podría poner en peligro su vida.Si cualquiera de nosotros hubiera sido Mordejai, ¿Cómo habríamos reaccionado frente a su indecisión?
Yo creo que una reacción normal hubiera sido preguntarle a Esther: ¿Cómo puedes estar pensando en ti en momentos como este?
O quizás decirle: «Vamos Esther ¡Tienes que hacerlo! ¡Te necesitamos! ¡No nos decepciones!Sin embargo la Biblia nos muestra la sabiduría de sus palabras. Él le dijo a Esther, «Si no es por ti, los judíos serán salvados por otra persona y si decides no ayudar cuando estás en posición de hacerlo, la que pierdes eres tú. ¿Y quién sabe, quizás, llegaste a la realeza sólo para tomar esta decisión en este preciso momento?».
Esther aceptó el desafío, corrió el riesgo de presentarse ante el rey sin ser llamada, le confesó su verdad y pidió por su pueblo y se convirtió en la posibilidad de cambiar el futuro de sus descendientes.
Tú eres la posibilidad!!. La primera vez que escuché estas palabras pensé que estaba mal dicho. Pensé yo no soy la posibilidad, yo puedo crear una posibilidad. Sin embargo en ese momento mi coach me mostró la importancia de usar el verbo ser. Desde la mirada ontológica nosotros creemos que el lenguaje crea realidad entonces decir que somos la posibilidad es crearla en nosotros mismos y vernos y sentirnos ella.. Estas palabras nos empoderan y nos retan para ir mas allá de nuestras comodidades y ayudar a alguien de una manera única que sólo nosotros podemos hacerlo.
Un solo acto de arrojo puede alterar el concepto de lo posible.
La vida no tiene limites,
lo importante es que creas
que puedes hacerlo.
Y que aproveches
todas las oportunidades
que se te presentan.
Chérie Carter-Scott
¿Acaso nos ponemos siempre a la altura de los desafíos que nos presenta la vida?
¿Tenemos claridad respecto a nuestra visión espiritual?
¿O a veces sólo pensamos que son coincidencias, los retos que se nos presentan y no les damos mayor importancia?
¿Conocemos nuestro potencial y lo ponemos al servicio de otros?
Creo que todos tenemos una misión única en esta vida, que solo podemos concretar nosotros mismos y para eso hemos sido dotados con todas las herramientas que necesitamos para llevarla a cabo.
Lo importante es estar preparado
para, llegado el momento,
sacrificar lo que somos
por lo que podemos llegar a ser.
Charles Du Bois
Las oportunidades en esta vida no son un mero accidente. La magnitud de cada momento no debería ser descuidado sino capitalizado en todo sentido.
¿Para qué sientes que puedes ser la posibilidad?
¿Qué es lo que sientes que el mundo necesita de ti especialmente?
¿Qué es lo que tienes que dejar hecho antes de partir?
El potencial nunca es una realidad presente,
sino una posibilidad futura.
Lair Ribeiro