MIRA en tu jardín las rosas entreabiertas, y no los pétalos caídos…
OBSERVA en tu camino la distancia recorrida y no lo que falte todavía…
CONSERVA en tus oídos las palabras de amor y no las de odio…
GRABA en tus pupilas las líneas de tus sonrisas y no los surcos de tu llanto…
CUENTA a tus amigos el sol de tus primaveras y no la tempestad de tus inviernos…
CONSERVA de tus pies los pasos que dejan huella, olvida los caminos equivocados…
RECUERDA con placer tus escaladas, olvida las frustraciones de las bajadas…
RECUERDA los días en que fuiste agua limpia, olvida las horas en que te sentiste pantano…
CUENTA y muestra las medallas de tus victorias, no pongas atención en las cicatrices de las derrotas…
DESPIERTA EL PODER DENTRO DE TI, y recuerda que…
En la profundidad de las noches sin luna
es donde pueden brillar más las estrellas!
Pienso que al terminar de leer este párrafo habrás descubierto que la clave de conectarte con tu poder personal es poder hacer foco en lo que hay y en lo positivo en lugar de hacerlo en lo negativo o en lo que falta
¿Por qué será que nos cuesta tanto reconocer lo que hay?
¿Por qué nos empecinamos en enfocarnos en lo que no funciona?
Te sugiero un ejercicio:
Sale a comer con una amigo y busca que toda la conversación que mantengas con él durante todo el encuentro sea positiva y verás cuanto esfuerzo tienes que hacer para mantenerla en modo apreciativo.
Mi felicidad consiste en que sé apreciar
lo que tengo
y no deseo con exceso lo que no tengo.
Leon Tolstoi
Sostengo que hay instalada en la sociedad como una visión que nos lleva a ponernos en modo crítico. Es como una forma de pensar que se dirige especialmente a distinguir errores y enfocarnos en los problemas, reduciendo nuestra visión del mundo a una división entre buenos y malos.
Una alternativa a esta postura podría ser apreciar las cosas que funcionan, aquellas que están bien, como punto de partida para mejorar. De esta manera nos empoderamos y cambiamos nuestra interpretación del mundo.
No hay mayor desprecio,
que no tener aprecio.
(Anónimo)
Considero que al ponernos en positivo cambia nuestra energía, y empezamos a atraer cosas buenas. Nos cambia el humor y tenemos como una sensación diferente de la realidad. En el modo apreciativo podemos distinguir y reconocer la cantidad de maravillas que hay en nuestro mundo y que vivimos todos los días en automático. Las emociones que transitamos cambian, mejoran y nos ayudan a ver la vida de otro color.
La finalidad de la vida es la apreciación:
nada tiene sentido sin ella.
¿Cómo te ves a ti mismo en distinguiendo lo valioso y significativo de las personas y de los hechos?
¿Piensas que tienes esa capacidad o podrías desarrollarla?
¿De qué manera te parece que esto podría influir en potenciar tu poder interno?
¿Consideras que esta podría ser una herramienta para tener en cuenta?
Cuando nos enfocamos en lo negativo nos instalamos en la queja y en la posición de victima y finalmente ¿quién quiere estar al lado de un quejoso?
Si cerramos un ojo
resulta muy difícil poder apreciar las distancias. Si cerramos los dos, mucho más.
Jaume Perich