¿Crees que hay personas que tienen mas «suerte » que otras?
¿Comparas tu vida con la de los demás?
¿Crees que aún aquellas personas que han tenido grandes pérdidas o tragedias en su vida, pueden ser felices?
¿Piensas que aun aquellas personas que tienen el privilegio de ser ricas o famosas, pueden sentirse miserables?
¿Reconoces que la actitud que tengamos frente a los hechos que nos toca vivir es la que puede hacer la diferencia en nuestras vidas?
¿Sabías que las personas tenemos el poder de elegir la actitud que vamos a tener?
¿Tenemos el derecho a sentir que la vida es dura, no importa cuales sean las circunstancias que nos toca vivir?
¿Te das cuenta que aunque la vida no sea justa, podemos sentirnos felices?
En mi vida he sufrido muchas veces, pero los momentos que mas me han costado atravesar fueron aquellos que estuvieron asociados a pensamientos de justicia o de cómo deberían haber sido las cosas.
Una vez alguien me preguntó:
¿Quién te dijo que la vida es justa?¿Acaso ves justicia en la vida de los demás?
Y fue entonces que pude empezar a cuestionarme la certeza de aquellos pensamientos de justicia que me hacían entrar en el sufrimiento.
Considero que después de haber atravesado mi proceso ontológico personal puedo decir que el sentimiento de justicia vive en nuestros pensamientos de cómo deberían ser las cosas y hoy sabemos que no hay una sola manera de que ellas sean, si no que de acuerdo con la persona y con la actitud que tengamos, las mismas pueden ser muy diferentes.
El que no quiera vivir
sino entre justos,
que viva en el desierto.
Séneca
Por otra parte considero que este tiempo del verbo que termina en «ía», el condicional, como tendría o debería de por si, ya nos lleva a pensar que sabemos como las cosas son y que tendrían o deberían ser de esa manera, lo cual ya nos mete en un sufrimiento al ver que las cosas no son como pensábamos.
Para mi fue todo un descubrimiento cuando me di cuenta que no sólo los hechos que ocurrían era lo que me hacía sufrir, sino mi forma de hablar y de pensar. Y cuando aprendí a hablar de otra manera y a elegir mis pensamientos pude desarticular gran parte del sufrimiento que sentía.
Cuando un hombre pide justicia
es que quiere que le den la razón.
Santiago Prats
Piensa en la justicia cuando veas un niño enfermo o en sillas de ruedas o una madre que ha perdido un hijo y en ese momento te darás cuenta que la vida no es justa pero puedes elegir ser feliz con lo que tienes.
Piensa en todas las cosas con la que la vida te ha favorecido.
Busca reconocer las situaciones con las que no tuviste que lidiar en tu vida
Piensa en alguien al que la vida lo ha tratado injustamente y reconoce los motivos por los cuales podrías admirarlo.
Busca un «elegido» y piensa si cambiarías tu vida por la de él.¿Cuales serían las razones por las que sí y cuáles por las que no?
Si tu pudieras cambiar una sola cosa en tu vida ¿Que sería lo que cambiarías?
¿Qué te impide hacerlo?
¿Cuáles son los momentos en que piensas en la justicia de la vida?
¿Con qué estás conectado en esos momentos?
Cuando la vida te sonríe y navegas en abundancia ¿También piensas si la vida es justa?
El jurado está compuesto por doce personas elegidas para decidir quien tiene el mejor abogado.
Robert Lee Fros