Un coleccionista de relojes antiguos se encontró cierta vez con que uno de sus favoritos había dejado de funcionar.
Angustiado, consultó a decenas de expertos, pero ninguno pudo arreglarlo.
Hasta que dio con alguien que, después de examinar la joya durante un buen rato, tomo un pequeño martillo, le dio un golpecito en cierto lugar preciso, y el reloj comenzó a funcionar.
Feliz, el coleccionista preguntó: ¿Cuánto le debo?
Mil dólares, contestó el otro.
¿Está loco? ¿Mil dólares por un golpecito?
No, el golpecito cuesta 1 dólar.
Saber dónde y cómo darlo, 999
¿Cuántas veces hemos escuchado que solo la acción produce resultados?
¿Pero qué acciones son las que te acercan a ellos? ¿ Cualquiera?
Es aquí donde entra la distinción: ACCIÓN EFECTIVA
Entiendo por efectiva la acción que hace falta hacer, la que me conduce a los resultados que quiero.
Si no estoy parada en los resultados deseados, lo que hice no sirve.
“Nunca confundas movimiento con acción”
Ernest Hemingway
Sostengo que la efectividad en la acción está relacionada con:
· ENFOQUE
· PRIORIZAR LO IMPORTANTE FRENTE A LO URGENTE
· PROACCIONAR
· COMPROMISO CON LOS RESULTADOS
· ENCONTRARLE SENTIDO A LA ACCIÓN
¿Cómo sería enfocarte en tus objetivos sin distraerte de ellos?
¿Cómo sería hacerlos importantes, ponerlos en primer lugar y no perderlos de vista?
“La visión sin la acción es soñar estando despiertos
La acción sin la visión es una pesadilla”
Proverbio japonés
Llamamos proaccionar al accionar responsablemente en lugar de reaccionar. Es el hábito de la responsabilidad. Es el poder de elección de la emoción que me va acompañar en la acción.
¿Puedes encontrarte responsable al 100% de cada acción, sin pararte en las excusas ni en las circunstancias, solo enfocándote en los resultados que quieres lograr?
“Si no estamos parados en los resultados
lo único que tenemos son los motivos
por los cuales no logramos nuestros objetivos”
Resulta evidente pensar que hay algunas cosas sobre las que no tenemos ningún control y otras en las que si podemos hacer algo.
Ser proactivo significa trabajar en aumentar la zona de influencia a partir de actitudes que mejoren la relación conmigo mismo y la relación con los demás y el entorno.
El compromiso se relaciona con nuestra capacidad de realizar y cumplir promesas. Ser el compromiso en lugar de estar comprometidos
El verbo estar nos relaciona con lo temporal con lo que es hoy pero puede no ser mañana en cambio el verbo ser nos relaciona con lo permanente , con lo que no cambia, con lo que es esencial, por eso hablo de SER EL COMPROMISO frente a nuestros objetivos
La palabra compromiso viene de prometer.
¿Puedes ver como el compromiso con las metas nos conduce a la promesa que nos hacemos a nosotros mismos para lograrlas?
Vivimos en una época light y como tal los compromisos también suelen ser lights por lo que muchas veces nos comprometemos con objetivos y luego no hacemos lo que hace falta hacer para concretarlos.
¿Consideras que recuerdas todas tus promesas y las tienes presente frente a tus elecciones diarias?
“Quien tiene un QUÉ
Encontrará siempre un CÓMO”
Nietzsche
Y finalmente cuando hablo de sentido me refiero a un PARA QUÉ . Podríamos pensar que los objetivos son el para qué de la acción, sin embargo el propósito de ellos no siempre está alineado con nosotros y es por eso que a veces no le encontramos demasiado sentido a lo que hacemos
¿Tiene sentido para ti la cantidad de horas que trabajas?
¿Tiene sentido para ti la tarea que haces?
¿Cómo podrías ponerle pasión y entusiasmo a algo que no tiene tanto sentido?
Al conectarnos con el propósito aparece el sentido y es ahí donde podemos desarrollar toda nuestra creatividad y dedicarnos a hacer lo elegido con el corazón.
“Ningún viento sopla a favor de un barco sin destino”
Proverbio Inglés